5 dispositivos con IA que han sido anunciados desde que OpenAI lanzó ChatGPT

El hardware tecnológico impulsado por inteligencia artificial está atravesando uno de sus mejores momentos.

Desde que OpenAI lanzó ChatGPT en noviembre de 2022, las empresas se han apresurado a sacar provecho del auge de la IA generativa. 

Grandes tecnológicas como Meta —la matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp— o Google han creado sus propios modelos lingüísticos de gran tamaño (LLM, por sus siglas en inglés), y las startups de inteligencia artificial están recaudando cientos de millones de euros para desarrollar herramientas que podrían servir para ahorrar tiempo y aumentar la productividad.

Algunas compañías están llevando sus esfuerzos en materia de IA al siguiente nivel: integrar la inteligencia artificial en nuevos y llamativos dispositivos de consumo. Dan Ives, experto tecnológico, calificó esta nueva frontera de la innovación como "la gallina de los huevos de oro" para los líderes tecnológicos de la próxima década.

De momento, algunos de los mayores proyectos se mantienen en secreto.

Los rumores apuntan a que Sam Altman, CEO de OpenAI, está trabajando precisamente con Ives, diseñador del iPhone original, en la construcción de un dispositivo de IA. Por su parte, Apple planea integrar funciones de inteligencia artificial en su ecosistema, con el fin de intensificar sus esfuerzos en materia de IA, pero todavía no se conocen más detalles con respecto a estas iniciativas. 

En cambio, otras empresas ya se han adelantado y están lanzando al mercado sus nuevos y relucientes gadgets de inteligencia artificial. Estos son los cinco dispositivos con IA que se han presentado desde el lanzamiento de ChatGPT:

El R1 es un dispositivo de inteligencia artificial de bolsillo que ayuda a realizar tareas para las que normalmente se necesitan aplicaciones que solo pueden alojarse en un smartphone o en un ordenador.

Los usuarios pueden pulsar un botón para hablarle al R1 como lo harían con un walkie-talkie y hacer que organice un viaje, reserve vuelos y haga reservas a través de aplicaciones como Uber, según detalla la propia Rabbit. Los usuarios también pueden entrenar al dispositivo para que ejecute órdenes específicas, explica la compañía.

El dispositivo, que cuesta 199 dólares (y que se espera que llegue a la Unión Europea y Reino Unido en junio de 2024 con un precio de 184,95 euros), ya se puede reservar. El primer lote de unidades empezará a enviarse este mes, según Rabbit.


La última versión de las gafas inteligentes Ray-Ban de Meta está diseñada para facilitar las tareas diarias. Lanzadas el pasado septiembre, las gafas incluyen un asistente conversacional integrado que los usuarios pueden activar diciendo: "Ey, Meta".

Según detalla el gigante tecnológico, este asistente puede responder preguntas, resumir resultados de búsqueda y llamar y enviar mensajes. Incluso puede sugerir comentarios generados por IA en publicaciones de Facebook e Instagram.

Las gafas con inteligencia artificial de la matriz de Facebook están disponibles en 7 colores desde 299 dólares (en España se pueden encontrar a partir de 329 euros). Además, se pueden personalizar con lentes graduadas por un coste adicional.

Si un dispositivo de inteligencia artificial para tu bolsillo y otro para tus ojos no son suficientes, quizá quieras hacerte con el AI Pin de Humane.

Diseñado por exempleados de Apple, este pin es un dispositivo autónomo sin pantalla que puede engancharse a la ropa. El AI Pin incluye una cámara, sensores, altavoces, una "luz de confianza" que parpadea si está grabando y un pequeño proyector que puede transmitir información a tu mano. Funciona con GPT-4, el LLM que se esconde detrás de ChatGPT, de OpenAI.

Humane asegura que los usuarios pueden pedirle al pin que reproduzca determinadas canciones y responder a preguntas mediante comandos de voz. La cámara del dispositivo también puede proporcionar datos sobre el mundo que le rodea, según la empresa, como mostrar cuántas proteínas hay en un puñado de almendras que se encuentra en la palma de la mano del usuario.

El AI Pin —que ya está disponible en Estados Unidos, pero todavía no en España— se puede conseguir a partir de los 699 dólares (unos 644 euros al tipo de cambio actual), pero requiere de un pago adicional de 24 dólares al mes para poder asignarle un número de teléfono móvil dedicado. Además, si quieres un acabado pulido en tu pin, tendrás que pagar otros 100 dólares.

Humane ha anunciado que se espera que los envíos también comiencen a producirse partir de este mismo mes.


Si lo tuyo no es llevar puesta la inteligencia artificial, un smartphone con capacidades de IA puede ser una mejor opción.

El Galaxy S24 de Samsung, el último buque insignia de la compañía surcoreana que fue lanzado el pasado enero, incluye la función "círculo para buscar", con la que los usuarios pueden dibujar un círculo alrededor de un objeto concreto en una imagen y hacer que el teléfono identifique qué es eso exactamente.

En su reseña del dispositivo, Roberto Corrales, de Business Insider España, comentaba que le gustaba que las funciones de IA del Galaxy S24 no se sintiesen "nada intrusivas", pero a su vez te pudiesen ayudar "muchísimo", por ejemplo, "a la hora de traducir a otro idioma" tus chats de WhatsApp o las llamadas de voz.

Los teléfonos de Samsung también incluyen edición fotográfica por inteligencia artificial, que permite a los usuarios eliminar objetos o personas de las imágenes, y se pueden conseguir desde 909 euros en el caso del Galaxy S24 y a partir de 1.479 euros en el caso del S24 Ultra.

Prophetic afirma que Halo, su diadema con IA, permitirá a los usuarios controlar sus sueños.

Según la empresa, los usuarios deberán ponerse el Halo para dormir y la diadema detectará cuándo el usuario ha entrado en la fase más profunda de su sueño. Una vez que lo haga, activará una serie de instrucciones para disparar señales de ultrasonidos al cerebro con el fin de inducir el sueño, explica Prophetic.

La startup ha abierto la inscripción a una beta para que los primeros usuarios prueben el Halo, que cuenta con un precio de 2.000 dólares (unos 1.800 euros). Aun así, no está claro si la diadema ha sido probada por personas reales fuera del laboratorio o si realmente permite controlar los sueños.
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